Durante la lección pasada has comprendido la diferencia entre doxa y Episteme. Recordemos que la doxa es una forma de conocimiento poco fundado cambiante y sin garantía de verdad, mientras que la Episteme es un conocimiento justificado que puede ser verdadero que puede ser un conocimiento de carácter científico resultado del ejercicio de la razón.
A partir de esta lección pondremos nuestra atención en el conocimiento y las problemáticas filosóficas que giran en torno a él. Revisaremos de manera específica ¿Cuál es el origen del conocimiento? para poder responder a esta pregunta debemos considerar algunos otros cuestionamientos como ¿Qué es el conocimiento? ¿Es posible conocer la realidad? ¿Cómo podemos determinar la verdad o falsedad de un conocimiento? entre algunas otras cuestiones.
Para ir entrando en materia, debemos comprender que la pregunta por el conocimiento y la capacidad cognoscitiva de los seres humanos es tan antigua como la propia humanidad, ya que los primeros seres humanos se asombraron ante los sucesos del mundo. Esos sucesos condujeron a la humanidad a una búsqueda constante de respuestas y explicaciones sobre ellos.
La filosofía al ser entendida como un afán de saber o búsqueda de la sabiduría intenta llegar a una concepción del universo mediante la autorreflexión de sí misma. Es desde la epistemología que la filosofía busca comprender, entender y explicar los problemas relacionados con el conocimiento. A partir de las reflexiones epistemológicas sobre el conocimiento se generan y desarrollan teorías acerca de la explicación e interpretación filosófica del conocimiento humano, pero a todo esto ¿Qué es el conocimiento?
El conocimiento puede ser entendido como la relación que se establece entre un sujeto y un objeto, mediante la cual el sujeto capta mentalmente la realidad del objeto. (Enciclopedia Herder, 2017)
Los elementos del conocimiento son el sujeto que conoce, el objeto por conocer, y la relación (operación cognitiva) que se da entre el sujeto y el objeto para que se dé el conocimiento.
A continuación, explicamos cada uno de los elementos del proceso de conocimiento.
Las representaciones mentales de los objetos aprehendidos o conocidos pueden ser sensibles o intelectuales.
Las representaciones sensibles o imágenes proceden de los sentidos y representan las cosas concretas e individuales. Las características de este tipo de representaciones son:
- Se captan por los sentidos
- Son reproducidas por la imaginación
- Son singulares
Ejemplo: Si una persona capta a través de sus sentidos un gato de determinado color, forma o tamaño, su mente posee la facultad de reproducir ese objeto con todas las características que sus sentidos han captado, esa imagen que su mente ha reproducido sería únicamente de ese objeto y no de cualquier otro gato.
Las representaciones intelectuales o pensamientos proceden del entendimiento y representan a los objetos de manera universal, dicha representación se aplica a todos los seres de la misma especie sin importar su tamaño, forma, forma, color, etcétera. Las características de este tipo de representación son:
- Se captan con la inteligencia
- Son exclusivas de los seres humanos
- Son universales y abstractas
Ejemplo: El pensamiento “gato” representa a todos los gatos como un animal mamífero felino de tamaño pequeño, cuerpo flexible, cabeza redonda, patas cortas, cola larga, pelo espeso y largos bigotes.
Actividad H5P
Instrucción para el alumno: ¡Es el momento de revisar lo aprendido!