A la psicología se le ha vinculado fuertemente, a la “afectividad”. Pese a que es una disciplina diversa, existe entre la población la idea generalizada de que la psicología se orienta casi de manera exclusiva, al factor emocional. Lo cierto es que en nuestra vida hay aspectos de nuestra vida anímica que contribuyen de forma importante a nuestra regulación personal y a nuestro mundo de relación.
MOTIVACIÓN
El vocablo motivación tiene una raíz etimológica latina que significa movimiento. Como concepto, es de los más empleados por la población en general. La mayoría de las personas lo utilizan como sinónimo de objetivo; no obstante, desde la psicología tiene un enfoque más dinámico y complejo. Cuando hablamos de motivación nos referimos básicamente a los motivos que nos impulsan a conseguir una meta, eso es cierto, pero también implica un encuadre de comportamiento que hace notorio a quienes nos rodean, hacia dónde nos “dirigimos” y lo que buscamos alcanzar con una proyección de tiempo.
BASES BIOLÓGICAS DE LA CONDUCTA MOTIVADA
La motivación tiene un carácter biológico de origen. Conductas como los ciclos sueño-vigilia, el hambre y la saciedad, y la conducta sexual, están reguladas desde el Diencéfalo, específicamente desde una de sus estructuras que es el hipotálamo.
El hipotálamo se localiza en la base del cerebro. Aunque es una estructura relativamente pequeña, es de gran importancia en el control del sistema nervioso autónomo, en la integración refleja, en el control del sistema endocrino, y en la organización de conductas relacionadas con la supervivencia de la especie.
El hipotálamo controla la agresión, la alimentación, la huida y el deseo sexual, quizá por ello se le conoce como “el centro motivacional humano”.
PSICOLOGÍA DE LA MOTIVACIÓN
La psicología ha estudiado desde hace mucho tiempo qué “mueve” a los seres humanos. Por un lado se ha reconocido la importancia de las necesidades orgánicas que posibilitan la activación de efectores para su satisfacción; no obstante, el énfasis se centra en necesidades que trascienden lo biológico, y que llamamos “motivos”.
CLASIFICACIÓN DE LOS MOTIVOS
Los motivos no se ven a simple vista, constituyen metas internas que no se pueden apreciar a no ser que se expresen en conducta motivada. En una clasificación general, podemos señalar que hay dos tipos de motivos:
- Primarios, que hace referencia a las necesidades fisiológicas indispensables para la supervivencia, como el hambre, la sed, cobijarse ante condiciones climáticas, la evitación del dolor, la sexualidad, entre otros.
- Secundarios, son aquellos que se desarrollan a través del aprendizaje, por lo que dependen más del contexto cultural.
Tomando en cuenta el origen del motivo, podemos hablar de Motivación extrínseca y Motivación intrínseca. La primera hace referencia al impulso que un incentivo, recompensa o premio tiene en el comportamiento; como podemos ver, hay aquí una estrecha relación con la perspectiva conductual. La segunda hace alusión a las necesidades psicológicas que regulan el comportamiento, tales como la autodeterminación, la curiosidad y la eficacia.
OTRAS TEORÍAS DE LA MOTIVACIÓN
- LA TEORÍA DE LOS IMPULSOS. Vinculada a la búsqueda de la homeostasis. La teoría freudiana, sobre la lucha entre las pulsiones de vida y muerte (eros y thanatos) puede ser un buen ejemplo sobre cómo hay fuerzas internas que pugnan en nuestro interior.
- TEORÍAS CONDUCTISTAS. También llamadas teorías centradas en el “incentivo”. Señalan que los estímulos externos pueden orientar la motivación. Recibir un diploma por buen aprovechamiento puede ser un buen ejemplo de estas teorías.
- TEORÍAS NATURALISTAS-EVOLUCIONISTAS. Señalan que la conducta motivada es una consecuencia de la evolución de nuestra especie, y que los motivos de pertenencia, de identidad o de reconocimiento tienen un valor adaptativo.
Aparte de las teorías ya señaladas, hay otros autores que son reconocidos en el tema de la motivación humana: la motivación de logro de McClelland, la teoría ERG de Alderfer o la teoría de los dos factores de Herzberg.
Complementa la información con el siguiente video sobre la Motivación y sus teorías:
EMOCIÓN
La emoción se puede definir como una respuesta ante una estímulo o situación que involucra un proceso afectivo psicológico o una fuerte reacción y expresión corporal, así como un impulso a la acción. Tiene una función adaptativa a las situaciones del entorno y son de carácter innato, nacemos con ellas, sin embargo, el contexto cultural puede influir en la forma en que se expresan.
Las emociones están conformadas por tres elementos importantes:
- Reacciones fisiológicas internas. Se activan centros nerviosos, sobre todo del sistema nervioso simpático.
- Reacciones fisiológicas externas (conducta manifiesta). Presentan diversos matices.
- Representación subjetiva o interpretación individual de los acontecimientos. Es la vivencia particular sobre lo que se está viviendo; es atributiva porque está mediada por significados e interpretaciones.
CENTROS CEREBRALES DE LA EMOCIÓN
El sistema nervioso autónomo, por medio de su división simpática y parasimpática, entra en actividad ante las experiencias emocionales, regulando la actividad de las glándulas, los vasos sanguíneos, los músculos, etc. Debido a esto tenemos múltiples sensaciones y reacciones, como las “mariposas o el dolor en el estómago”, la sudoración, el incremento del latido cardiaco y de la temperatura, entre otras.
La amígdala juega un papel muy importante en la manifestación de las emociones. diversos estudios sugieren que allí se encuentra la respuesta de miedo, necesaria para nuestra supervivencia y para reaccionar ante el mundo que nos rodea. La amígdala está muy cercana al hipocampo, la estructura de la memoria, de allí que nuestros recuerdos nos generan emociones y viceversa, que a partir de las emociones podamos crear recuerdos.
La corteza prefrontal del cerebro también tiene una importante participación en la respuesta emocional, ya que está vinculada al razonamiento, el lenguaje y las cogniciones en general. En su región derecha se encuentran las reacciones de escape o miedo, mientras que en la región izquierda se encuentran las de enojo y principalmente la alegría.
TEORÍAS SOBRE LA EMOCIÓN
Dada su complejidad, existen diferentes teorías que buscan brindar una explicación en torno a ellas. Las principales teorías son las siguientes:
Teoría Evolucionista.- señala que las emociones tienen un valor adaptativo, enfocadas a la sobrevivencia de los seres vivos y se encuentran al servicio de las funciones vitales.
Teoría fisiológica o de James-Lange. establece que interpretamos las emociones experimentadas mediante las expresiones faciales y los cambios viscerales producidos; la emoción, por tanto, no es producida por los estímulos propiamente, sino por los cambios orgánicos generados por ellos.
Teoría de Cannon-Bard. Sostiene que la experiencia emocional y la activación fisiológica ocurren al mismo tiempo y no de manera sucesiva.
Teoría de la activación cognitiva de Schachter-Singer. Esta teoría señala que la activación fisiológica es una condición necesaria-para experimentar una emoción, sin embargo, la cualidad de ésta determina la valoración subjetiva que se haga de ella, siendo principalmente agradable o desagradable dependiendo de las consecuencias y las capacidades que se considera tener para hacer frente a la situación.
Robert Plutchik, teorizó sobre las emociones, y las graficó en una rueda en forma de flor. La rueda de las emociones de Plutchik está compuesta por 8 emociones primarias y otras que son secundarias.
EMOCIONES PRIMARIAS: alegría-tristeza; anticipación-sorpresa; ira-miedo; aversión-confianza.
Para que tengas información sobre las emociones básicas y sus combinaciones, te invitamos a visitar la página siguiente.
Actividad H5P
Ahora es momento para que refuerces lo aprendido a través de la siguiente actividad.