Las categorías estéticas son los conceptos o sensaciones que se desatan como reacción a la contemplación de una obra de arte, con base en nuestro gusto o juicio estético.
En el desarrollo del proceso creativo, es decir, desde el creador de una obra, se puede también elegir o tratar de propiciar una categoría estética determinada. Esto significa que se pueden plantear desde la realización de la obra, los modos o las sensaciones que se proponen o se buscan en el espectador.
En la mayoría de las manifestaciones artísticas de la antigüedad, la categoría más perseguida fue la belleza, en tanto que la reacción provocada por una obra se determina por el gozo que causa su contemplación, y la belleza al implicar o representar un concepto ideal que alude a la perfección, y la armonía, fue el más buscado.
Sin embargo, también existen otras como: lo cómico, lo dramático, lo trivial, lo sublime, lo grotesco, entre otras.
- Lo cómico:
La mente del ser humano tiene la capacidad de interpretar de modo lúdico aspectos o comportamientos que se entienden como ridículos, defectuosos, inesperados o burlescos. De igual forma la risa es una reacción a la observación o vivencia de algo gracioso que simplemente es hilarante. Lo cómico es un aspecto que se puede encontrar o percibir de manera común en la vida cotidiana.
En el arte se ha captado o representado de diversas maneras, desde el género de la caricatura, hasta la comedia literaria. El objetivo de la representación de lo cómico puede ser el divertimento, la burla o la crítica y denuncia satírica.
- Lo dramático o trágico:
El género dramático de la tragedia surgió en la antigua Grecia con las obras literarias de Esquilo, Sófocles y Eurípides.
En el arte, esta categoría estética plasma y desata sentimientos humanos de amargura y dolor derivados de acontecimientos funestos y eventos desafortunados. Lo que implica la tragedia o lo dramático es la imposibilidad de superar las situaciones difíciles o funestas que se convierten en problemáticas sin solución y con terribles desenlaces.
- Lo trivial:
Lo trivial se refiere a todo aquello que se ha vuelto banal por el hecho de la repetición y de la costumbre. Es concebido como opuesto a lo profundo o novedoso, en tanto que no aporta o genera conocimiento.
- Lo sublime:
Sublime quiere decir elevado y se aplica a lo que se percibe como supremo, grandioso e ilimitado.
Como categoría estética se genera en el espectador al contemplar o vivenciar una manifestación artística que desata sensaciones de elevada satisfacción, y un encuentro de sentimientos de goce, impacto, estremecimiento o placer sin límite y que, de acuerdo al juicio estético, se describa como sublime.
- Lo grotesco:
El término grotesco proviene del italiano y significa extravagante, irregular, grosero o de mal gusto.
En el arte, lo grotesco es una categoría estética que hace referencia a lo intencionalmente exagerado, a una representación desfigurada de la realidad y la naturaleza, a una fusión imposible de objetos o elementos incompatibles. Lo grotesco puede implicar entonces sensaciones de repulsión e incomprensión al momento de su contemplación.
Actividad H5P
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